jueves, 29 de agosto de 2024

Recitales de PIANO

Os adjuntamos la programación de un ciclo de conciertos de reputados pianistas de músicas contemporáneas que se van a celebrar a finales de septiembre en Salas de los Infantes (Burgos).

Con esta iniciativa, que se suma a las diferentes propuestas relacionadas con la investigación y la divulgación científicas, se trata de contribuir a hacer más amable la vida de los habitantes de este territorio del mundo rural, periférico y montañoso, de Castilla y León, accediendo a creadores e intérpretes, en este caso, pianistas de calidad y reconocidos nacional e internacionalmente. Además servirá como aliciente para que visitantes de las ciudades cercanas se acerquen a nuestra comarca a disfrutar de un tipo de música que normalmente solamente se programa en entornos urbanos. La cultura, la educación y el disfrute musical contribuirán, al menos durante los días del ciclo de conciertos, al desarrollo económico y turístico de la comarca de Salas de los Infantes. 

En esta ocasión, van a intervenir la pianista japonesa Mine Kawakami (http://www.minekawakami.com/profile/index_esp.html


y los españoles Alberto Vilas (https://albertovilasquintet.wixsite.com/albertovilas

y María Parra (https://mariaparrapianist.com).

En esta iniciativa se ha solicitado la colaboración de la Diputación Provincial de Burgos y del Ayuntamiento de Salas de los Infantes.

Los pianistas han manifestado su disposición a propiciar, en los días previos a sus intervenciones, entrevistas a los medios que puedan estar interesados, para lo cual quedamos a vuestra disposición.

Recibid un cordial saludo.





domingo, 21 de julio de 2024

SOL, MOMIAS Y MUCHOS FÓSILES

La mañana es fresca. Los excavadores se preparan para un día más de trabajo en el yacimiento. Como todos los días, los grupos abordan las furgonetas que los llevarán al sitio. Se nota cansancio en las rostros de los excavadores. Sus cuerpos están quemados por el sol y su piel reseca, como si se tratase de una expedición en el mismísimo desierto. Pero el ánimo no decae y, de esa misma forma, se nota el entusiasmo por continuar.

Los integrantes toman sus puestos de trabajo en el yacimiento. Cada frente es minuciosamente trabajado.

La mesa de registro está siempre atenta al material extraído que, con rapidez, los encargados registran y embalan. 

En el área de excavación preparan los bloques que contienen fósiles que son preparados con la técnica llamada “momia”. Extraen la roca alrededor de los fósiles con mucho cuidado de no dañarlos y dejar literalmente un pequeño pastel de tierra listo para ser retirado. 

Todo el trabajo es documentado digitalmente y es labor de los fotógrafos, que buscan los mejores ángulos para realizar sus tomas en los procesos de excavación y extracción de fósiles.

No muy lejos del yacimiento principal, en dirección noreste, un par de excavadores se encargan de extraer un fósil que fue visado durante los trabajos de prospección. Alejados del resto del equipo, trabajan bajo el arduo sol, sin importarles más que recuperar el fósil. 

Los accidentes ocurren en cualquier oficio y no es la excepción en la excavación. La caída de uno de los integrantes fue rápidamente atendida sin mayor riesgo. 

De esta manera, a pocos días de concluir la excavación, el ritmo de trabajo no decae y sigue como al principio, pese al clima, polvo o otros contratiempos. Se pretende acabar de la mejor manera extrayendo la mayor cantidad de fósiles posible. 


Crónica realizada por Yuri Pavel

jueves, 18 de julio de 2024

LA QUINTA MARCHA

“Stay fo-cused on your goal”. Hoy, la camiseta sin mangas de Pablo (hace mucho calor y el termómetro alcanza los 30 grados en el yacimiento de la Yecla) nos deja claro el mensaje: “Mantente firme hacia tu objetivo”. Y es que la campaña de excavaciones enfila hacia su recta final, los trabajos de descubrimiento y extracción de fósiles de dinosaurios se aceleran y hay que meter la quinta marcha. Pero con cabeza, que el calor y el cansancio que se acumula, tras doce días ya de mover tierra, no nuble nuestro objetivo.

Fotografiamos cada mañana minuciosamente cada palmo del yacimiento para documentar la situación y el punto exactos en el que aparece cada pieza, gracias a la constancia y buen hacer de Juan Pedro (JP) y Denia. 

Los fósiles que van apareciendo son extremadamente frágiles y, antes de extraerlos, hay que consolidar su estructura con gasa y paraloid, con una brochita muy fina, para optimizar su conservación y posterior estudio. 

A estas alturas de la campaña empezamos a preparar las primeras “momias”, que son el revestimiento adecuado para poder afianzar y trasladar los piezas más grandes al laboratorio del Museo para su restauración, sin que sufran ninguna alteración ni rotura. 

Para realizar una “momia” de protección utilizamos cartón, arena, papel de aluminio y un revestimiento de espuma de poliuretano proyectado, que se deja secar y queda lista para su traslado.

 En las largas horas que se comparten en la excavación desde primera hora de la mañana, hasta el final de la tarde, cercana ya la puesta de sol, no falta el sentido del humor, los debates de los temas más dispares y el intercambio de experiencias y confidencias entre la veintena de participantes en esta excavación, que se desarrolla en una ladera de poco más de 50 metros cuadrados. Rodeados del bosque de sabina albar mejor conservado de Europa donde viven las familias de buitres leonados tan característicos del bello parque de Sabinares del Arlanza- La Yecla.

 Las mañanas silenciosas en este paraje de cuestas suaves rodeados de sabinas, quietud, calma chicha y silencio sólo roto por el canto de las chicharras, suelen ser el momento más dulce de la jornada. Afortunadamente, contamos con el apoyo de un aljibe de agua y un gran toldo de camuflaje que nos da sombra, y que proporciona cada año puntualmente el Ejército de Tierra, a quienes agradecemos siempre su leal colaboración. Ah! Y los dos botijos que nos acompañan para calmar la sed. 

 Hoy hemos llegado hasta la sigla 85 que resulta ser un pequeño diente de cocodrilo. Antecedido por una costilla, varios osteodermos y lo que parecen ser unas vértebras articuladas de un individuo aún indeterminado. La “sigla” es el nombre o la identidad que se da a cada pieza que vamos encontrando, sea ésta grande o pequeña. En el argot de los investigadores se denomina también registro y en ella aparecen unas letras con las que se conocerá esta campaña, así como el número de orden en el que se ha encontrado y la fecha. Todo ello queda puntualmente descrito y documentado para facilitar el trabajo de reconstrucción, restauración, descripción, investigación y datación de los fósiles. 

Por cierto, finalizamos la jornada de muy buen humor y con alegría porque, además de los éxitos que ya se auguran en esta campaña, acabamos de conocer que nuestro compañero de Salas de los Infantes, Victor Contreras, -uno de los benjamines pero ya veterano del equipo de excavación- acaba de obtener un 9,7 en su Trabajo de Fin de Grado de Veterinaria, con una investigación detallada sobre las enfermedades que han quedado registradas en  los huesos de tres dinosaurios saurópodos diferentes de la Sierra de la Demanda.  ¡Enhorabuena, querido Victor! Te queremos.

Crónica de Agustina Ureña

miércoles, 17 de julio de 2024

CRÓNICA DEL MIÉRCOLES 16

Un camino lleno de sorpresas...

La segunda semana de la campaña paleontológica en Hortezuelos arranca sin tregua de nuevos hallazgos.

Además del trabajo que hasta el momento ya os hemos presentado, estos últimos días han estado también acompañados de prospecciones de campo para hallar posibles restos fósiles que sirvan como indicadores para futuras campañas. Estas prospecciones se realizaron por parte de nuestros compañeros Adrián, Álvaro, David, Juan y Martín en el entorno del pueblo de Hortezuelos. Por lo general, el entorno investigado se compone de areniscas y calcarenitas (roca caliza con parte de arenisca) y en ellas es posible encontrar restos fósiles directos, aunque no llegan a ser tan espectaculares (ni completos) como los del yacimiento. Estos, en cambio, aparecen en superficie tanto incrustados en la roca como dispersos en el suelo, fragmentados e incluso a veces alterados químicamente por óxido metálico, quedando cubiertos por una costra o reemplazados (parcial o totalmente) por estos compuestos. Esto les aporta un distinguible color amarillo, naranja o marrón, y también provoca que sean confundibles con simples concreciones metálicas.

Sin duda, estas evaluaciones son reflejo de la sobresaliente riqueza fósil que abunda en la zona, tanto que incluso durante un paseo dominguero, el camino no está exento de sorpresas.

Crónica por Martín Jauregui.